Monday, September 10, 2007

rèn xiāo yáo

Estoy leyendo Moteros tranquilos, toros salvajes. Lo hago desde que, hace 3 años, justificara su compra con la promesa de terminarlo antes de que me lo pasara el Corte Inglés, esto es, al mes y pico de comprarlo un mediodía de septiembre.
A mi no me hace falta mucha madera para arder. Me indigno con facilidad y paso del amor al odio en lo que un fórmula 1 entra y sale de boxes. A 100 páginas del final, odio a William Friedkin y, si no mejora su actitud en el rodaje de Apocalypse Now, odio a Fefé Coppola. Odio a muerte en Filipinas.
Realmente venía a hablar de lo mucho que me había gustado Placeres desconocidos de Jia Zhangke, de cómo se pueden contar historias solo con paciencia, sin dinero, sin alardes y sobre todo sin ego. A ver si aprenden algunos, incluidos los que ganan oscars, su única ambición conocida, con remakes de películas asiáticas de no más de 5 años. Y no quiero señalar.

Influencia# 36: Jia Zhangke

2 comments:

Tok said...

señale usted señale.... que ellos bien que se marcan los tantos, coppola es un mendrugo chocho, y scorsssseseee un copiota de lo peor!

Tok said...

y no te digo lo que me dice chang que ponga porque te cierran el blog por incitación al asesinato....